La Unidad de Cultura de la Municipalidad de Aysén y la Fundación para la Superación de la Pobreza, presentaron ante el Concejo Municipal los primeros esbozos de un trabajo colectivo para el fortalecimiento de las artes y el patrimonio pensado desde la co-construcción, el cual reorienta la mirada hacia la participación territorial y el reconocimiento de diversas identidades.
Con la presencia de representantes del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio en la transmisión, se expuso el Plan Municipal Cultural (PMC) que se alinea a la planificación comunal, por Cristián Torres, encargado de la Unidad de Cultura, y Mauricio Osorio, coordinador del equipo de trabajo del PMC, quienes centraron las acciones en el rescate de la memoria, la infraestructura, el patrimonio y las personas como sujetos de derechos.
“Estos lineamientos son o han estado desarrollados previamente por la Fundación para la Superación de la Pobreza en conjunto con el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio”, aclaró Torres, especificando que van de la mano con las proyecciones de la casa edilicia al ampliar la noción de cultura y su promoción de manera transversal.
El instrumento de gestión, en palabras de Osorio, tras evaluar el estado actual del sector, “se instala como una solución que va a dar posibilidades de intervenir y comunicar estratégicamente los objetivos de la planificación cultural, ver temas de presupuesto, conectarse con las realidades locales de toda la comuna y coordinar con otras instancias de la Municipalidad de Aysén”.
Además, en la ponencia se planteó la recuperación y apropiación de espacios emblemático para la población como el Cine Municipal, la Casa de la Cultura y la Biblioteca Pública de Puerto Aysén, junto a la puesta en valor del patrimonio natural y cultural desde una lógica de abajo-arriba, es decir, a partir de los niveles articulados por la ciudadanía a las instituciones.
“Es importante involucrar a la comunidad en este proceso, y más que importante es sumamente necesario. No tendría sentido que, en este caso, desde la Unidad de Cultura o desde un Plan Municipal, o desde cualquier institución se venga a imponer alguna idea en cualquier ámbito, ya sea política, cultural, artística o de planificación urbana sin consultar o sin incluir a la comunidad.”, especificaron desde el municipio porteño.
Esta óptica, enfocada en las características locales y comunitarias, considera como construcción social dinámica a los grupos humanos, entendiendo que son protagonistas de procesos simbólicos y de manifestaciones en el plano material e inmaterial de un cuadro heterogéneo en que se perfilan, recrean, y donde se piensa la acción pública en colaboración a otras entidades, siempre bajo la concepción de la ciudadanía cultural.
¿Qué es cultura?
Otro de los desafíos propuestos por el equipo de la Unidad de Cultura y la Fundación para la Superación de la Pobreza es ampliar el concepto de cultura entre los moradores, lo que implica reformular mecanismos de intervención más allá del entretenimiento, junto a la resignificación de la raíz etimológica.
En ese contexto, algo que marcó la jornada fue la apertura de la presentación con una anécdota al recordar la pregunta de una vecina de si iban a hacer más actividades, lo que dio paso a una conversación cercana y espontánea en cómo la cultura es parte de cada individuo en el tejido social.
“Durante mucho tiempo se ha confundido el concepto de cultura y ha quedado remitido a un aspecto”, sostiene Torres, explicando que en “ese sentido quedan relegados u olvidados otros aspectos de la enorme diversidad cultural que tiene Aysén”. Lo que lleva a visibilizar a las localidades a partir de su cosmovisión, el entendimiento de otros capitales culturales, al igual que el del cuidado del patrimonio y la necesidad de reconocer la diversidad de prácticas culturales dentro del PMC.