Miguel Ángel Calisto juró como diputado resaltando su compromiso con la región de Aysén

El diputado DC participará en las comisiones de Zonas Extremas, Vivienda y Defensa. Además, agradeció el apoyo tras su deportación de Cuba.
Valparaiso.- Tras jurar como diputado y participar en la elección de la mesa que presidirá la Cámara durante el año 2018, Miguel ángel Calisto recalcó algunos puntos fuertes de lo que será su gestión, además de agradecer el apoyo recibido por la gente de Aysén luego de ser deportado de Cuba al intentar participar en un acto de la disidencia.
Según el diputado Calisto, “hoy juramos como diputado por la región de Aysén. Mucha gente se sumó a nuestro proyecto y a nuestra campaña. Les quiero agradecer a todos ellos. Yo ante todo soy un diputado regional, un diputado de Aysén, que va a estar todas las semanas ahí porque yo vivo en Coyhaique. Vamos a mantener un ritmo constante para hacer un trabajo lo mejor posible, en terreno y con la gente”.
“Yo he solicitado tres comisiones, una de ellas es Vivienda. Espero poder presidirla en algún momento de este periodo. Con esa herramienta vamos a apoyar fuertemente a los comités de la región. También voy a participar en la comisión de Defensa, tomando en cuenta que nuestra zona es limítrofe, que tiene una relación permanente con Argentina. Creo que este es un punto importante que tenemos que poner sobre la mesa para tener una buena relación con nuestros vecinos”, afirmó el diputado.
La tercera comisión en la que participará Calisto será Zonas Extremas. El parlamentario aseguró que “esto es fundamental para atender la situación de las zonas rezagadas de nuestro país y nuestra región puntualmente, como por ejemplo Islas Huichas, que está viviendo una situación compleja estos últimos días”.
Con respecto a su frustrado viaje a Cuba, Calisto indicó que “quiero agradecer las muestras de cariño de todos los habitantes de Aysén que me hicieron llegar mensajes de apoyo. Este es un país donde no se respetan los valores democráticos. Queda nuevamente en evidencia que en Cuba no se vive en democracia y libertad. Más allá del color político, de ser de derecha y de izquierda, hay un valor que es más importante, la libertad del ser humano para reunirse, para pensar y actuar como uno quiera. Eso es lo que está en juego en este país donde la disidencia sufre mucho”.