Esta iniciativa forma parte del programa Prototipos de Innovación Social de Corfo, financiado con recursos del Gobierno Regional de Aysén a través del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC), del Fondo Nacional de Desarrollo Regional.
Puerto Cisnes.- Todo un éxito resultó al ejecución del Proyecto “Por mí y por todas mis vecinas” con la comunidad educativa de la Escuela Guido Gómez Muñoz de Puerto Cisnes, dirigido a profesores/as, alumnos/as y apoderados/as, que busca identificar la violencia contra la mujer y entregar herramientas óptimas para erradicarla.
Si bien esta iniciativa, que se desarrolló por casi dos meses en dicho territorio, está estructurada para trabajar directamente con juntas vecinales de diversas comunas de la región de Aysén, esta vez sumó un desafío mayor para el equipo como es la incorporación de la comunidad escolar.
Hayley Durán Bocaz, directora del proyecto, destacó que muchos de los problemas que se generan al interior de las escuelas, por niños y niñas que tienen ansiedad o que presentan comportamientos violentos o disruptivos, están relacionados con lo que ven y viven en sus casas a diario: “Viven en un ambiente familiar, comunitario o vecinal donde la violencia es pan de cada día”. Por ello, subrayó que fue fundamental trabajar con la escuela de la localidad, ya que “todas las personas del territorio de alguna u otra forma están vinculados, siendo el tema de la territorialidad relevante”.
Durán indicó que este proceso fue diferente al vivido en juntas de vecinos, puesto que en esta oportunidad la mirada estuvo puesta en los niños y niñas y cómo les afecta a ellos la violencia. “La comunidad valoró el poder conversar sobre la violencia que se vive en el día a día. Entregamos herramientas para empezar aportar con pequeños granos de arena con el objetivo de resolver esta problemática, donde nuestros principales focos son la prevención y la erradicación de la violencia”, puntualizó.
Por su parte, Enrique Garín López, director de Corfo Aysén, señaló que “la violencia intrafamiliar en un tema que nos debe preocupar como sociedad. En esta ocasión, como institución dependiente del Ministerio de Economía y con el apoyo del Gobierno Regional, también pudimos hacernos parte de este relevante tema y aportar a mejorar la calidad de vida de muchas familias, lo cual es el fin último que buscamos a través de la aplicación de nuestros instrumentos”.
OPORTUNIDAD ÚNICA
Una de las participantes, Viviana Flores, psicóloga de la Escuela Guido Gómez, enfatizó que la actividad fue muy buena, completa, positiva y lúdica, ya que el poder conversar permite compartir vivencias y experiencias, tanto desde el punto de vista de las mujeres, como de la violencia que se ejerce en general. “Fue bastante enriquecedor como grupo de trabajo y como comunidad escolar, ya que nos ayudó a tener mayor cercanía con los alumnos/as y apoderados/as del establecimiento educacional”, lo que a su juicio, contribuyó para que la comunidad internalice que están para ayudarles en todas las situaciones.
Asimismo, declaró que fue un espacio de relajación y calma. “Nosotras pensábamos que iba ser una exposición, pero el dar apertura a la conversación y que las expositoras fueran más cercanas, nos daba calma. Nunca fue una lata, siempre fue una experiencia rica”, explicó.
Claudia San Juan, docente encargada de Convivencia Escolar del establecimiento, calificó el taller como “fantástico”, dando a conocer que apareció en su vida en un momento preciso, donde tenía mucha tensión, con alta carga emocional, profesional y emotiva. “Tengo pocos espacios donde puedo aliviar mis propias cargas, fue magnífico, maravilloso. Lamento que no haya habido más gente interesada”.
Asimismo, hizo hincapié en que todos/as necesitan, en algún momento, espacios como este, donde se entreguen herramientas, que incluso ella ya las está ocupando en su trabajo. “En este mes de taller he disminuido mucho la tensión, he mejorado la relación con mi hija y el clima en mi casa. La metodología es muy amigable y fácil de replicar”.
Uno de los principales focos en los que Claudia percibe el avance luego de participar de los talleres, es dejar de normalizar la situaciones de violencia y no castigarse, ya que según señala, las mujeres sienten mucha responsabilidad en los hombros, como la casa, trabajo, hijos, etc. y hoy en día, cambiando pequeños hábitos, se siente más conectada con su ser interior “Esta experiencia fue muy enriquecedora, me emociona tremendamente, no me había dado cuenta en lo que estaba, ahora estoy agradecida y feliz”, concluyó.
El objetivo central del Proyecto “Por mí y por todas mis vecinas”, del programa Prototipos de Innovación Social de Corfo, financiado por el Gobierno Regional de Aysén, es generar un modelo de respuesta comunitario para hacer frente a la violencia de género que permita a las comunidades prevenir, identificar riesgos, brindar apoyo a las víctimas y erradicarlo.