En reunión con la comunidad de Puerto Guadal Edelaysén se desiste de reinicio de faenas en Los Maquis

Presión de vecinos y vecinas, que estuvieron en solitario instalando el tema, derivó en el compromiso de la empresa de no reasentar en la pequeña localidad a decenas de trabajadores externos a la región, por los riesgos de contagio por COVID. Esto, al menos, mientras dure el estado de excepción constitucional.
Puerto Guadal.- “Lo que nosotros estamos diciendo es que si en virtud de lo que hemos propuesto, este plan de reinicio de obras, a ustedes no les parece, nosotros acogemos esa solicitud. Eso es lo que estoy diciendo. Decir que uno va a sacar una hoja o va a hacer una martingala para engañar, eso no está en nosotros. No lo vamos a hacer, no lo voy a hacer y no lo voy a permitir”.
Con estas palabras del gerente de comercialización de Saesa (controladora de Edelaysén), Marcelo Bobadilla, concluyó pasadas las 13 horas de este martes la reunión entre la empresa y las organizaciones y comunidad de Puerto Guadal donde la eléctrica presentó el protocolo de reinicio de faenas de la central hidroeléctrica Los Maquis, paralizadas desde marzo de este año producto de la pandemia.
El viernes último, en reunión con el alcalde de Chile Chico Ricardo Ibarra y los concejales, la compañía había informado que reiniciarían el 1 de julio, contratando durante cuatro meses un centenar de trabajadores, con 70 a 80 externos a la región.
Aunque la idea original era un encuentro con el Comité COVID, que integran varias organizaciones locales, la cita de amplió a la comunidad en general. Durante los últimos días se había difundido la molestia de la población, que derivó en una carta que suscribieron las dos juntas de vecinos locales, el Consejo Consultivo de Salud, la Agrupación de Carreristas y de Transporte de Carga, la AG de Turismo y la encargada del jardín infantil, donde entregaban antecedentes y se dejaba clara la postura: el rechazo al inicio de faenas mientras dure la pandemia. Es decir, postergación mientras no se levante el estado de excepción constitucional.
Esta lucha la comunidad la dio autónomamente. Este lunes el alcalde y concejo municipal de Chile Chico emitió un comunicado aclarando que no tenían injerencia en la decisión y que, por tanto, en la reunión con la empresa solo se habían informado y no se había resuelto nada al respecto, aunque señalaron que “nuestra apuesta y compromiso, será siempre y sin ninguna duda, por nuestro bien más valioso y a quienes nos debemos: nuestra comunidad. Ante esto, en la carta despachada se le solicitó que aunque se reconocía tal situación el municipio “sí tiene un amplio rango de posibilidades para proteger a la comunidad: judiciales, políticas, comunicacionales mostrando la preocupación y organización en la radio local, de movilización, como lo ha hecho en otras ocasiones”.
Y hoy la seremi de Salud, Alejandra Valdebenito, informó por la prensa que Edelaysén es una empresa avalada por el Ministerio de Hacienda, por tanto tendría ciertas prerrogativas para poder reiniciar faenas y que el organismo a nivel regional “lo único que debe hacer es preocuparse de que se cumplan los protocolos que se han establecido”.
Pero el pueblo dijo otra cosa.
Tras una hora de exposición de los representantes de Edelaysén, donde aprovecharon de promover las bondades de un proyecto que genera división en la localidad ya que hay vecinos y vecinas que cuestionan su impacto en la biodiversidad, el paisaje y el patrimonio sin someterse a evaluación ambiental, habló a nombre del Comité COVID la secretaria de la Junta de vecinos N8, Miriam Chible Contreras. “Nos gustaría que nos escucharan a nosotros, estamos acá gran parte de la comunidad organizada. Ayer tuvimos un encuentro y tomamos la decisión, por todo lo que está pasando en Chile y en el planeta, de pedirles que no reinicien el proyecto hasta que termine la pandemia” manifestó.
Luego de sus palabras, uno a uno los dirigentes fueron expresando su opinión.
La también dirigenta de la organización, Alicia Vera, profundizó en que “nuestra preocupación es solamente la desconfianza a todo lo que está pasando en el país. Es muy difícil confiar, como población chica, en que realmente los protocolos, las medidas y todo lo que se está planteando y los exámenes, sean un recurso seguro. Por eso nosotros lo que queremos, realmente, es que la obra se aplace”.
El presidente de la Junta de Vecinos “Los Pioneros”, Oscar Verdugo, aclaró que “la gente tiene miedo, hay un temor con este virus. Y yo como presidente hoy día digo no al Maqui… el otro día tuvimos una reunión con Carabineros y nosotros no somos capaces de poder enfrentar la situación nuestra (de seguridad), ¿y la vamos a enfrentar con 100 personas más?”.
“El señor Bobadilla dijo que debíamos sentirnos orgullosos del sistema que están implementando… A mí me da lo mismo una central o no, pero no tengo por qué sentirme orgulloso de que los dueños que van a lucrar son profesores de Canadá. ¿Qué orgullo para mí es eso? ¿Qué estén explotando nuestros recursos, capitalizando con nuestros recursos, profesores de Canadá? Eso no es ningún orgullo” reflexionó el también integrante de la Junta de Vecinos “Los Pioneros”, Alejandro Villegas. Esto, aludiendo a que Edelaysen pertenece al Grupo Saesa, controlado por Inversiones Eléctricas S.A., sociedad en que participan los fondos canadienses Ontario Teachers Pension Plan Board y Alberta Investment Management Corp. En su presentación, Bobadilla había destacado este hecho.
Angélica Antiñanco, presidenta de la AG de Turismo local, indicó que “la gran preocupación es la gran cantidad de adultos mayores. Y hoy en día la mayoría que está acá está pensando en ellos. Está comprobado con las salmoneras que en los últimos casos que han llegado a Aysén la mayoría llega con contagio, aunque se toman el test en Puerto Montt”.
Miguel Gatica, presidente del Consejo Consultivo de Salud, indicó que “hemos venido trabajando desde hace mucho tiempo en los temas relacionados con la pandemia. Y nuestra visión en que vivimos en un contexto muy complejo. Guadal no tiene los medios, la infraestructura ni nada de lo que tienen otros lugares. Y aún teniéndolos, en Guadal sería terrible un contagio. Con un contagio sería muy complicado para toda la población”. Sus palabras aludieron a que los adultos mayores representan al menos el 20 % de la población, con muchos vecinos y vecinas con problemas de salud crónicos que les exponen a un mayor riesgo. “Este proyecto atenta contra la vida de las personas de la comunidad si usted toma la decisión retomar la obra ahora. Si hay voluntad, hagan su obra pero más adelante cuando las condiciones estén dadas” indicó Gatica.