En una emotiva ceremonia se realizó la entrega de las Inscripciones de Dominio de las últimas cuatro familias beneficiadas -de las 26 favorecidas a nivel regional-, que fueron seleccionadas en la versión 2020 del subsidio que brinda la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena, que congregó una postulación récord que llegó a los mil 890 interesados, entre comunidades y personas individuales.
Coyhaique.- “Nosotros representamos a la Comunidad Indígena Mariñir y estamos contentas de estar aquí. Somos mujeres orgullosas de pertenecer a ella, la que fue creada por nuestros padres el año 2009 y fue la primera formada en la Región de Aysén, en tiempos en los que no se hablaba de comunidades”. Con estas palabras Yanet Antiñirre Raimilla – una de las beneficiadas-, demostró el agradecimiento a nombre de Jessica Antiñirre Silva, María José Antiñirre Raimilla y Tamara Antiñirre Levill, quienes recibieron las inscripciones de dominio por parte de la Conadi.
Para Cristian Soto Barrientos, Director Regional de la Corporación Nacional Indígena de la Región de Los Lagos, que viajó especialmente para la entrega, expresó que “lo que estamos marcando es justamente la certeza jurídica, entregando los títulos de dominio a la Comunidad Indígena Mariñir, donde se hacen adjudicatarios de 43 hectáreas de tierra que para subsidios del Estado ha implicado un desembolso de más de 100 millones de pesos, lo que viene a entregar una legitimidad a esta necesidad tan sentida del pueblo mapuche, de la posibilidad de obtener tierra”.
Para Pamela Huaitiao, Coordinadora Regional de la Oficina de Enlace local de Conadi, esta actividad se traduce en el cierre del 17° llamado para el Subsidio para la Adquisición de Tierras por Indígenas.
“Este ha sido un concurso que ha tenido 26 beneficiarios en la Región de Aysén, con una inversión de 650 millones de pesos, lo que va de la mano con otras acciones que estamos realizando con nuestros profesionales para otorgar equipamientos prediales, que se han adquirido a través de nuestro servicio, con el fin de dotar de herramientas y medios para hacer productivas las tierras indígenas”, explicó.
Para el Seremi de Desarrollo Social y Familia Marcelo Jélvez, esta instancia tiene una significación muy importante,” porque para las comunidades mapuches la tierra tiene un valor único y es un fundamento vital para el desarrollo de su cultura, aplicando esa sabiduría en la productividad del predio, tal como ahora se hará con el empuje de las familias que componen Mariñir. Por eso es importante estar atentos al siguiente llamado y esperamos que la convocatoria sea tan alta como lo fue el pasado 2020”.
Este subsidio de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena es un aporte estatal directo, sin cargo de restitución, destinado para la adquisición de tierras, a quienes resulten beneficiados por el concurso. A través de él se permite acceder a un aporte de hasta 25 millones de pesos para la adquisición de tierras por parte de personas, comunidades o parte de comunidades indígenas que no tienen territorio suficiente para desarrollar proyectos.