El defensor local de Aysén explicó el trabajo que la Defensoría Regional de Aysén realizó en favor de los imputados en prisión preventiva en la cárcel Puerto Aysén. Los internos reclaman por malas condiciones en el encierro.
Aysén.- El pasado lunes, la Defensoría Regional de Aysén solicitó en audiencia de cautela de garantías que Gendarmería de Chile disponga las medidas necesarias para solucionar los serios problemas de alimentación y calefacción que afectan a los imputados en prisión preventiva en la cárcel de Puerto Aysén lo que los llevó a iniciar una huelga de hambre líquida.
Así lo informó Roberto Silva, defensor local de Puerto Aysén, quien señaló que los problemas que aquejan a los internos son dificultades con la calefacción, ya que no funcionan las calderas del módulo imputados; por otra parte, el módulo presenta ventanas con vidrios rotos por lo que duermen prácticamente a la intemperie.
Por otra parte, hay problemas serios con la alimentación ya que relatan que esta es escasa y en horarios inadecuados. La última comida que se les entrega, que corresponde a la once, es cerca de las 14.30 horas y consiste en un líquido con un pan, “Al ser insuficiente el almuerzo algunos se comen antes este pan y pasan hasta el día siguiente sin comer”, explicó el defensor local.
A todo ello se suman la negativa de la unidad penal de recibir como encomiendas alimentos preparados por familiares de los internos, y sólo permiten alimentos envasados tales como galletas o golosinas, pero nada que signifique un real alimento.
En la audiencia de garantía, Gendarmería se comprometió a reparar la caldera en un plazo de días e inspeccionar la situación de ventanas rotas. Además coordinará con la nutricionista de gendarmería alguna respuesta sobre la situación de alimentación.
El defensor local de Aysén informó además que Gendarmería también se comprometió a entregar un mayor número de frazadas a quienes lo requieran.
“Como defensoría solicitamos además que se entregue la ayuda médica necesaria a los imputados que lo requieran (…) hasta el momento no hemos tenido noticias del alzamiento de la huelga por parte de los internos, quienes esperan ver los cambios antes de deponerla”, concluyó Roberto Silva.
Silva destacó que la situación procesal de los imputados en prisión preventiva, es decir que estén privados de libertad mientras se desarrollan investigaciones para dilucidar si tienen o no responsabilidad en un hecho delictivo, no debe afectar sus derechos de alimentación y de cumplir su prisión preventiva en un lugar en condiciones aceptables de habitabilidad. El Estado debe garantizar que estos derechos sean respetados con personas que están bajo su tutela.