La reconocida empresa aysenina ha tenido muy buenos resultados en su experiencia piloto.
Aysén.- Tras iniciar la incursión en el mundo del reciclaje industrial de plástico y plumavit, provenientes principalmente de la industria acuícola. Empresas Bahamonde ha querido implementar distintas transformaciones para integrar a diversos actores al proceso productivo local. De esta manera, luego de firmar hace unos meses un convenio de colaboración con el Centro de Estudio y Trabajo (CET) Valle Verde de Gendarmería de Chile en Puerto Aysén, se busca ampliar la colaboración inicial para aumentar los programas de inclusión del recinto penitenciario a través del trabajo como operarios en la nueva Planta de Reciclaje. Actividad que permitirá a los usuarios contar con nuevos conocimientos laborales y propiciar un mejor tránsito hacia su vida en comunidad.
Al respecto, el gerente general de la empresa aysenina, Alejandro Bahamonde Corey destacó que luego de esta ampliación del convenio con el CET “ya son tres personas de dicho Centro que están trabajando con nosotros y si todo resulta bien, yo creo que en noviembre vamos a incluir dos personas más, con las cuales llegaríamos a casi un 50% de las personas que trabajan en la Planta de Reciclaje provenientes del CET Valle Verde y nos tiene muy contentos y muy fascinados porque estamos dando una oportunidad laboral a muchas personas que por distintos motivos están en una condición a la cual nadie quisiera llegar, pero como digo, fascinados y contentos a la vez”.
En tanto, Karim Laibe Monsalve, Capitán y jefe de Unidad en el Centro de Estudio y Trabajo (CET) Valle Verde, abordó el inicio de la colaboración con Empresas Bahamonde a través de un usuario que presta sus servicios en la nueva Planta. Hecho valorado ampliamente por la buena experiencia que ha significado, agregando que “lo importante para nosotros es que las personas que están acá privadas de libertad buscan una forma de reinsertarse en la sociedad y qué mejor que con una empresa local que claramente les va a ayudar primero, para generar un sustento a sus familias y también, cuando ellos estén libres, cuando ya cumplan su condena, quizás pensar en continuar trabajando en ese lugar y aprender un nuevo oficio”.
Finalmente, Carlos Ruíz, interno del Centro de Estudio y Trabajo (CET) Valle Verde, agradeció la oportunidad otorgada por la icónica empresa aysenina a quienes se encuentran privados de libertad, “yo no solamente aproveché la oportunidad, sino que también vengo en representación de mis demás compañeros. creo depende de mí que se le abran las puertas a ellos y a la vez, quiero dejar bien puesto el nombre de Valle Verde… Yo me he sentido bien cómodo en esta empresa porque tengo muy buenos compañeros y he tenido una muy buena recepción de parte de ellos”, puntualizó finalmente Ruíz.