Impulsar “la descentralización” era el principal objetivo de las normas votadas este jueves por el Pleno del Consejo Constitucional y que corresponden al Capítulo VI: “Gobierno y Administración Regional y Local” de la propuesta de nueva constitución. No obstante, para muchos, las normas votadas no responden a este espíritu sino que, quedan al debe con décadas de discusión en la materia.
Santiago.- Entre las materias abordadas este jueves está la organización del territorio “en regiones, provincias, comunas y territorios especiales” y tendrá como metas la integración armónica, la sustentabilidad y el desarrollo del país.
Entre las voces disidentes estuvieron las del consejero, Julio Ñanco (RD), quien fue enfatico en señalar que que las normativas propuestas en este capítulo parecen dar marcha atrás en el proceso de descentralización.
“Por ejemplo, el artículo 126 de la propuesta señala que la ley priorizará que las funciones públicas sean erradicadas en el nivel en que se ejercen con mayor eficiencia y eficacia. Sin embargo, el anteproyecto inicial indicaba que la ley priorizará que las funciones públicas sean radicadas en el gobierno local sobre el regional y este último sobre el nacional, lo cual va en sentido contrario a las necesidades de las personas que vivimos en las regiones”, puntualizó.
Misma reflexión hizo su par el consejero Christian Suárez (PS), quien criticó la falta de “una política verdaderamente descentralizadora” que permita avanzar hacia un Estado regional y señaló que el texto mantiene “las mismas normas declarativas que han existido siempre”.
Otros de los principios que no resultaron aprobados es el de interdicción de la arbitrariedad presupuestaria, es decir, la distribución equitativa de recursos para las regiones.
Desde Unidad para Chile cuestionaron que la Comisión Experta, compuesta mayormente por santiaguinos, presenta mayores avances que la propuesta del Consejo Constitucional, integrado por consejeros de regiones. El consejero Aldo Valle (PS) consideró que se está “perdiendo una oportunidad histórica”.
Por último el consejero Julio Ñanco, reafirmó su compromiso con la descentralización, ya que en su visión “es esencial para el futuro de Chile”.
“Nos permite reconocer la diversidad de nuestras regiones como una fortaleza en lugar de una debilidad. Empodera a todos, desde el norte hasta el sur y desde el sur hasta el norte, a contribuir al desarrollo y a la prosperidad de Chile. La descentralización no es una opción, sino una necesidad para un Chile más fuerte y unido”, enfatizó.