Balmaceda.- Cuando las bajas temperaturas nos recuerdan que aún queda invierno por delante, la comunidad de Balmaceda no detiene su movimiento, y no se trata del aeropuerto o las obras de mejoramiento de la vía; al contrario, es el voluntariado de esa localidad que con esfuerzo y recursos propios, puso en funcionamiento un comedor social para ir en apoyo de los adultos mayores del sector.
Esta labor social comenzó en la escuela Antolín Silva Ormeño, donde los propios funcionarios decidieron cocinar a los adultos mayores que viven solos en esa localidad; preocupación y empatía por el prójimo que con la llegada de las vacaciones, tampoco ha cesado en su funcionamiento, como lo explica Sonia Fuentes Carrillo, auxiliar de la escuela rural. “Teniendo voluntad todo es posible, así que ahí empezamos, traíamos alimentos de la casa para cocinarles, de ahí se sumaron las profesoras y los voluntarios de bomberos que hicieron colecta puerta a puerta para tener más alimentos. De mi parte, me siento orgullosa porque puedo ser útil para la persona que nos necesita, nosotros lo hacemos con cariño y corazón, porque todos vamos para el mismo camino.
Labor social de este grupo de personas que recibió una ayuda inesperada, ya que el matadero Inducar al conocer de estos esfuerzos, decidió comenzar a donar carne para enriquecer la dieta alimenticia del comedor social. Tal como lo manifestó el Gerente Gral. del Matadero Inducar, Humberto Vidal Pacheco. “Como empresa regional, estar colaborando en esta noble causa con los abuelitos de Balmaceda es muy gratificante, reconforta hacer estas cosas en vida, creo que te llena en el alma estar trabajando y colaborar con este granito de arena, y también hay que destacar el trabajo que hacen las señoras en el colegio. Creo que estos adultos se merecen una vida que sea confortable, hay que agradecerles porque en algún momento ellos trabajaron para esta región y hay que valorar eso.”
Los almuerzos que se preparan de lunes a viernes en la escuela, son distribuidos por voluntarios de la Brigada de Bomberos de Balmaceda, donde además se han sumado también funcionarios de carabineros y alumnos del establecimiento.
Para la Seremi de Desarrollo Social, Dominique Brautigam, quien también ha participado de este voluntariado, valoró la unión de voluntades en este comedor social. “Hay que destacar la labor de un grupo de trabajadoras de la escuela, donde se sumaron también voluntarios de bomberos y sobretodo la empresa de don Humberto Vidal, porque entregamos almuerzos a distintos adultos mayores que se encuentran en situación de vulnerabilidad en este territorio, es un ejemplo para poder replicar y que nos sirve para invitar al sector privado en hacerse parte de este tipo de acciones, ya que tal como lo ha manifestado el Presidente Sebastián Piñera, desde el comienzo de su Gobierno, que… Chile Lo Hacemos Todos.”
El comedor social seguirá funcionando durante los próximos meses de invierno, ya que gracias a la voluntad de un grupo de personas, marca una diferencia vital para varios adultos mayores que hoy prácticamente viven solos en esta localidad.