Emplazada en medio de una pequeña pero acogedora localidad como es Mallín Grande, se encuentra la escuela rural Tulio Burgos Rivera, establecimiento que cumplió 80 años al servicio de la educación de este apartado sector de la comuna de Chile Chico.
Chile Chico.- El director y profesor de este colegio municipal, Robinson Cárdenas, cuenta algo de la historia y resalta el compromiso de sus alumnos como así también de sus apoderadas.
“Muy contento porque son ochenta años de nuestra escuela, que comenzó siendo una escuela alfabetizadora, donde los papás tuvieron la necesidad de contratar a un profesor para que les enseñara a los niños lo principal, leer y escribir, las cuatro operaciones. Ahora, todos pueden ver que a medida que han pasado los años nuestra escuela ha ido mejorando y hoy estamos a la par de un establecimiento particular subvencionado y mejor aún diría yo. Además, es importante destacar el apoyo que recibimos nosotros como apoderados y me siento muy contento, orgulloso de mis estudiantes, porque somos una escuela rural pero mis alumnos están a la par de cualquier colegio urbano”.
Para la presidenta del centro general de padres y apoderados de la escuela de Mallín Grande, Carmen Avilés, las instancias de participación entre el colegio y la comunidad, son espacios que se deben aprovechar y proteger lo que tanto les ha costado mantener como es el establecimiento.
“Aquí lo importante es que trabajamos a la par todos, entonces, cuando el profesor nos da la oportunidad nosotros no la desperdiciamos y es por ello que trabajamos en conjunto niños, apoderados, equipo del colegio y la comunidad. También decir que, estamos agradecidos del Municipio y del señor Alcalde porque con nuestra escuela ha sido un excelente apoyo. Así mismo, invitamos a todas las mamás y las ex apoderados que se hagan participe de nuestras actividades, que no se pierda esto que no ha costado tanto mantener”.
Aurora Leichlte, es apoderada de una estudiante de la escuela Tulio Burgos Rivera, quien junto con destacar la metodología de enseñanza, resalta el gran trabajo de los profesores Robinson Cárdenas y Carla Reyes.
“Como apoderada yo me siento orgulloso de tener a mi hija acá en la escuela, porque se enseñan cosas que en otros lados no, ya que aparte de las materias, les enseñan cómo salir adelante y les tratan de fomentar las habilidades que tienen. Yo les saco el sombrero al profe Robinson y a la profe Carla, porque como ellos no hay, son muy motivados y gracias a su importante trabajo la comunidad siempre está pendiente de las actividades que hace la escuela”.
“Educar para la vida”, es el eslogan de la escuela rural municipal de Mallín Grande, en la comuna de Chile Chico. Un establecimiento donde la dedicada labor de los profesores ha permitido entregar más allá de las clases teóricas, muchas actividades prácticas y conocimiento general en materias como la cocina, artesanías y el trabajo de la tierra.