Senadora Órdenes destaca proyecto que permite rebaja compra de medicamentos a través de la Cenabast

La Sala del Senado aprobó el proyecto de Ley que autoriza la intermediación de medicamentos por parte de la Central de Abastecimiento de los Servicios de Salud (CENABAST) a almacenes farmacéuticos y farmacias privadas, lo que fue destacado por la Senadora Ximena Ordenes dada la importancia que tiene, por ejemplo, para los adultos mayores.
Aysen.- La iniciativa aprobada en el Senado tiene como objeto facultar a la CENABAST para que opere como intermediaria en la compra de productos farmacéuticos entre los proveedores y las farmacias o almacenes farmacéuticos privados, cuando se cumplan ciertas condiciones, con la finalidad de disminuir los actuales precios de los medicamentos y dispositivos médicos.
El proyecto de Ley permite que las farmacias independientes puedan comprar medicamentos mediante CENABAST, a través de convenios con farmacias pequeñas o que sean la única que existe en el pueblo o localidad, sin aplicar a las farmacias de cadena.
La senadora Ordenes dijo que “si bien el proyecto es un avance y lo valoramos, claramente es una medida parcial que apunta a una rebaja en un sector del mercado de los medicamentos, en las farmacias privadas y pequeñas que atienden a un determinado sector. Sin embargo, lo que nos demanda la ciudadanía es mucho más: avanzar en garantizar gratuidad de los medicamentos a los adultos mayores, quienes representan actualmente 3 millones de chilenos y chilenas, y avanzar con prontitud en la aprobación de la Ley de Fármacos II”.
“Este avance es muy importante, dado que, según el ISP, en el país existen 3.638 farmacias autorizadas; el 46% está en la Región Metropolitana, y cerca de 1.700 farmacias son independientes. Sin embargo, existen 50 Comunas en el país sin ningún tipo de establecimiento farmacéutico, y con esta iniciativa, representará un ahorro de un 75% respecto del precio de las cadenas”, expresó.
Ordenes aseguró que la Fiscalía Nacional Económica (FNE) comunicó en su informe preliminar que los medicamentos son un bien de primera necesidad y que era urgente adoptar medidas que permitan a la población acceder a ellos. “Ello confirma la necesidad de disminuir el costo de estos especialmente entre quienes más los demandan y tienen menor disponibilidad económica para obtenerlos, como los adultos mayores”, añadió.
“Asimismo, una encuesta realizada por la FNE detectó también que, mayoritariamente, los pacientes acatan la recomendación del facultativo y se muestran reticentes a cambiar lo indicado por una alternativa más barata. Las farmacias, a su vez, venden a los pacientes los medicamentos de marca recetados, los que son adquiridos por ellas a los laboratorios a precios en promedio un 70% más caros que el sector público”, añadió.
La senadora aseguró además que, “tal como señalan diversos estudios, el 80% de los medicamentos inscritos en Chile aún no tienen alternativas bioequivalentes y que los laboratorios realizan inversiones superiores a US$ 200 millones al año para promover sus marcas entre los médicos, quienes recetan tales productos a sus pacientes en vez de otras alternativas técnicamente equivalentes y más baratas”.
Agregó que el gasto de bolsillo en salud (“GBS”), específicamente en medicamentos, es alto en Chile si se compara con el promedio de los países OCDE, que se encuentra en torno al 38% del total del GBS, siendo el gasto más importante en salud, según estudios.
La senadora Ordenes finalizó reiterando que “es imperativo avanzar hacia mejores políticas públicas que beneficien a grupos vulnerables, como el de los adultos mayores, dado que hasta que no se genere un cambio estructural a las AFP’S, tendremos un precario sistema de pensiones que no alcanza para cubrir necesidades básicas de la tercera edad”.