“Así es como de un problema, nace una solución, positiva y conjunta” señaló alcalde Carlos Gatica, y es que tras sostener diversas reuniones con miembros de distintas asociaciones y organizaciones de Coyhaique para dialogar acerca de la obligatoriedad de impartir la asignatura lengua índigena sólo en los establecimientos que superen el 20% de alumnos matriculados que se identifican con los pueblos originarios, se concretó la mesa técnica denominada “Educación Intercultural Bilingüe en Contexto Mapuche, Comuna de Coyhaique”.
Luego de un arduo trabajo colaborativo entre la Municipalidad de Coyhaique, la Universidad de Aysén, las comunidades mapuches, el Ministerio de Educación y el Gobierno Regional, se logró crear un nuevo instrumento con modificaciones para registrar la ascendencia indígena de los y las estudiantes en el proceso de matrícula, con el fin de determinar el porcentaje requerido para impartir la Asignatura de Lengua y Cultura de Pueblos Originarios Ancestrales. Dicho instrumento lleva por título “Instrumento de Medición de Calidad Indígena para Establecimientos Educacionales”.
Al respecto, el alcalde Carlos Gatica señaló que “estamos contentos por lo que se llevó a cabo. No hay que olvidar que esto se da a raíz de una crisis, de un problema que sufrimos al interior de nuestros establecimientos educacionales por el bajo reconocimiento de los alumnos y alumnas, y también de los padres, en su pueblo originario y la verdad es que hoy, en base a ese problema, nace una solución que fue creada por las comunidades mapuches pertenecientes a nuestros pueblos originarios, el Gobierno Regional, la academia de la Universidad de Aysén y el Municipio. Ahora nos queda desarrollar este instrumento que sale de la mesa en todos los procesos de matrícula de aquí en adelante”.
Por su parte, la gobernadora regional, Andrea Macías, agregó que “muy felices terminando y cerrando un proceso con la finalidad de poder avanzar en un instrumento que nos permita detectar cuántos estudiantes efectivamente existen en los colegios municipales que sean pertenecientes a algún pueblo originario. Invito a todos y todas para que este trabajo pueda lograr el objetivo que es que podamos contar con este programa en todas las escuelas municipales. El llamado es a los apoderados y apoderadas que van a los procesos de matrícula de los colegios municipales, a reconocerse y a reconocer a nuestros pueblos originarios, permitiendo que podamos revitalizar la lengua de nuestros pueblos originarios”.
A las palabras de las autoridades se sumó la Ñizol Zulema Calfulef, quien indicó que “salimos muy contentos de esta reunión porque pudimos lograr que se pudiera realizar el sueño que anhelábamos para nuestros niños y niñas. A partir de los próximos días los colegios tendrán conocimiento de las decisiones que se tomaron en esta instancia con la comisión técnica, en la que estuvimos trabajando para que saliera el formulario en el que le pedimos a padres e hijos reconocerse como parte de alguna comunidad indígena. Aprovecho de hacer un llamado a reconocerse y lograr el 20% que necesitamos en cada establecimiento educacional para llevar a cabo la asignatura”.
Yorka Cheuquian, concejala de la comuna, también fue parte del proceso y comentó que “llevamos trabajando todo octubre, noviembre y ahora, en los primeros días de diciembre, podemos decir que ha nacido un nuevo instrumento con el que nuestros niños y niñas, que también son sujetos de derecho, podrán conocer su lengua y cultura. Comenzaremos concientizando a la población para reconocerse como pueblo originario que, la verdad de las cosas, siempre ha estado presente. Agradezco a la Universidad de Aysén, al Gobierno Regional, a las asociaciones y comunidades y al Municipio por este logro, este instrumento es algo muy esperanzador”.
En cuanto finalizó la última reunión de la mesa técnica y durante los próximos días, el Municipio estará trabajando para hacer llegar la información a los colegios municipales para así poner en marcha el formulario creado y garantizar una educación multicultural para los niños y niñas de Coyhaique.